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Millonarios subsidios a energía y gas licuado en El Salvador

Un análisis realizado por el Banco Mundial reveló que entre 2000 y 2022, los subsidios para energía y gas licuado de petróleo (GLP) en El Salvador ascendieron a más de $3,838.3 millones. El informe, titulado «Subsidios indirectos en el consumo de energía eléctrica y gas licuado de petróleo en El Salvador», señala que durante este periodo, el Estado destinó $1,913.6 millones para subsidiar el consumo de GLP y $1,924.7 millones para la electricidad.

Estos montos representan un 15.5 % del total de la deuda pública reportada por el país en 2021. El análisis destaca que las erogaciones variaron a lo largo de los años, con un aumento significativo del costo del subsidio eléctrico entre 2005 y 2012, impulsado por el alza en el costo del petróleo a nivel internacional.

El gobierno mantiene el subsidio focalizado del gas licuado de $8.04 para los hogares más vulnerables, y en 2021 se aprobó una ley transitoria para subsidiar los incrementos de este derivado, fijando un valor máximo de venta al consumidor. Además, la Asamblea Legislativa aprobó extender el subsidio del gas licuado hasta mayo de 2024.

El informe también señala un error de inclusión en el otorgamiento de los subsidios, ya que aproximadamente el 74% de los beneficiarios no son pobres, según el Banco Mundial. Este organismo propone ampliar la cobertura y mejorar las transferencias a las zonas pobres, con el objetivo de otorgar una protección a los hogares, reducir la pobreza y mejorar el gasto público en torno a los subsidios.

En cuanto a la electricidad, más de 900,000 hogares contaban con subsidio de energía eléctrica hasta julio de 2022, y la Asamblea Legislativa aprobó una fijación en el precio de la tarifa de electricidad por seis meses, vigente hasta el 14 de abril de 2024.

El Banco Mundial plantea la importancia de los programas sociales y la necesidad de utilizar los recursos públicos de manera más eficiente, sugiriendo que la eliminación de los subsidios podría provocar un alza en la pobreza, pero este efecto podría contrarrestarse con la ampliación de transferencias focalizadas.

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