La recaudación tributaria en El Salvador cerró 2024 con resultados por encima de lo proyectado, impulsada principalmente por el dinamismo de los pequeños contribuyentes, que registraron un incremento del 15.1 % en sus aportes al fisco, según la memoria de labores del Ministerio de Hacienda presentada para el período junio 2024-mayo 2025.
De acuerdo con el informe, los ingresos tributarios y contribuciones sumaron $7,369.1 millones al término de 2024, lo que representa $406.9 millones adicionales (5.8 %) respecto a las proyecciones presupuestarias y un crecimiento de $550.6 millones (8.1 %) frente al desempeño de 2023.
El segmento de pequeños contribuyentes aportó $1,724.5 millones, equivalente al 23.4 % del total recaudado, con la tasa de crecimiento más alta entre los agentes económicos. En contraste, los grandes contribuyentes —tradicionalmente la principal fuente de ingresos— aportaron $4,323.4 millones, con un incremento del 6.7 % respecto al año anterior y una participación del 58.7 %. Por su parte, los medianos contribuyentes generaron $1,321.3 millones, un alza de 4.1 % y una participación del 17.9 %.
La cartera de Hacienda destacó que este desempeño se enmarca en los compromisos asumidos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) como parte del programa de $1,400 millones. Dicho acuerdo incluye la ampliación de la base tributaria, la reducción de la evasión fiscal y la incorporación de la economía digital al régimen tributario, medidas contempladas en el Plan Fiscal 2025-2027.
En cuanto a la recaudación sectorial, el 64.2 % de los ingresos tributarios provino de actividades vinculadas al comercio, la industria manufacturera y los servicios financieros y de seguros. El comercio lideró los aportes con $2,865.5 millones (38.9 % del total), seguido de la industria manufacturera con $1,137.8 millones (15.4 %) y el sector financiero con $727.7 millones (9.9 %).
A nivel territorial, San Salvador concentró el mayor peso de la recaudación con un 58.5 % del total, seguido por La Libertad, que aportó el 30.8 %.
El crecimiento sostenido de los pequeños contribuyentes refleja una mayor formalización y dinamismo en segmentos sensibles de la economía, consolidando su papel como un pilar clave en la estrategia fiscal del país.

