La Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) reconoció que el costo de los fletes se mantiene al alza, atribuyendo esta situación a problemas en el tránsito por el Canal de Panamá y al congestionamiento de los puertos marítimos. Un flete marítimo es el costo que un empresario paga por el alquiler de un buque o parte de este para transportar mercadería. Este costo despuntó en 2022, alcanzando nuevos récords y, aunque comenzaron a descender en 2023, siguen siendo más altos que antes de la pandemia de COVID-19 en 2020.
La presidenta de Coexport, Silvia Cuéllar, indicó que el tema logístico ha complicado y encarecido los costos de movilización. «Ese tema logístico ha venido un poquito a complicar, te encarece más, porque ese tema logístico no es que ha pasado, seguimos teniendo problemas en subidas, o sea incrementos en los envíos y recepción», afirmó Cuéllar.
El sector exportador también debe importar mercancía para elaborar el producto final que se comercializa, lo que impacta aún más el costo del flete. La caída en los niveles del agua en Panamá ha provocado problemas para movilizar la carga a través del Canal de Panamá, obligando a los barcos a transportar menos mercadería y, en muchos casos, a utilizar más de un navío para trasladar toda la carga.
Esta misma situación con el Canal de Panamá provoca que otros puertos en la región se congestionen. La Corporación señaló que, aunque el servicio marítimo en Honduras es “muy bueno”, tiende a ser más caro. Por su parte, Guatemala enfrenta una mayor congestión. «Entonces, ¿qué está pasando? Hay demasiada demanda y oferta viniendo y saliendo de lo que los puertos en este momento están ofreciendo en movimiento, eso hace un poco más cara la operación», explicó Cuéllar.
A los problemas logísticos se suma la cantidad de contenedores manufacturados en Asia que se encuentran en el mercado mundial y que aún se están normalizando. Esta situación generaría “limitantes” cuando las unidades funcionen con total normalidad. La pandemia provocó que las empresas comenzaran a adquirir más productos de los que necesitan para evitar desabastecimiento ante cualquier cierre de fronteras, lo que incrementa la demanda del servicio logístico.
En mayo, la Asociación Salvadoreña de Agencias de Carga y Transitarios (ASAC) advirtió que un aumento en el costo de los fletes marítimos amenaza con desencadenar una nueva crisis inflacionaria. Cuéllar confirmó que para algunos envíos o recepción de mercadería, los fletes podrían haberse triplicado, aunque aclaró que esto depende de dónde vienen y de dónde se originan.