En una histórica y controvertida sesión, la Asamblea Legislativa aprobó este lunes la nueva Ley General de Minería Metálica, con 57 votos de la bancada de Nuevas Ideas y sus aliados del PCN y PDC. La aprobación también significó la derogación de la Ley de Prohibición de Minería Metálica, vigente desde 2017. Los partidos Arena y Vamos votaron en contra de la medida.
La diputada Elisa Rosales, de Nuevas Ideas, fue la primera en tomar la palabra para defender la iniciativa, asegurando que la nueva ley tiene como eje central el bienestar del país y de los salvadoreños. Rosales afirmó que el Ejecutivo implementará estudios nacionales para determinar las áreas viables para la minería metálica, garantizando la protección de los recursos hídricos y del medio ambiente.
Por otro lado, la diputada Cesia Rivas, de Vamos, criticó la normativa, calificándola de una apuesta centrada en el poder estatal, pero no en la protección de los salvadoreños. Con un rótulo que decía «¡No Minería! ¡Sí a la vida!», expresó que la ley representa un retroceso para las luchas ambientales y sociales en el país.
El debate incluyó una propuesta de modificación al artículo 8, presentada por la diputada Suecy Callejas, que amplía la prohibición del uso de mercurio en actividades no comprendidas en el ciclo minero metálico, incluyendo otras sustancias no autorizadas por la Dirección correspondiente.
Diputados de Arena, como Francisco Lira y Marcela Villatoro, cuestionaron duramente la ley, calificándola de incoherente y peligrosa. Villatoro criticó a la bancada oficialista, acusándola de priorizar intereses económicos sobre la vida de los salvadoreños y el medio ambiente, recordando los datos de una encuesta reciente de la UCA que reveló que el 59.2 % de los salvadoreños rechazan la minería metálica en el país.
Desde la bancada oficialista, el diputado William Soriano defendió la medida citando datos del Banco Mundial, asegurando que cada dólar invertido en minería puede generar hasta cuatro en beneficios económicos para el país. Soriano destacó que los ingresos provenientes de la minería serán utilizados en proyectos sociales y de infraestructura para mejorar la calidad de vida de los salvadoreños.
El diputado del PDC, Reynaldo Carballo, justificó su voto a favor destacando la necesidad de los metales para el avance tecnológico y expresó su fe en que la minería futura se desarrollará con cero contaminación.
Finalmente, el presidente de la Asamblea, Ernesto Castro, sometió a votación la nueva ley, que fue aprobada con una amplia mayoría. Los diputados oficialistas celebraron la aprobación de pie, mientras las críticas de la oposición se mantuvieron firmes hasta el último momento.
La nueva ley abre un capítulo decisivo en el debate nacional sobre el desarrollo económico, la protección ambiental y la sostenibilidad en El Salvador.