La inteligencia artificial generativa (GenAI) ha emergido como una fuerza disruptiva en la estrategia tecnológica global, según revela un estudio reciente encargado por SAS a Coleman Parkes Research Ltd. Este informe destaca que China lidera la adopción de GenAI con un impresionante 83 % de organizaciones utilizando esta tecnología, superando al Reino Unido (70 %), Estados Unidos (65 %) y Australia (63 %).
Aunque China lidera en adopción, Estados Unidos destaca en términos de madurez operativa de GenAI, con un 24 % de organizaciones implementando la tecnología completamente, en comparación con el 19 % de China y el 11 % del Reino Unido. Según un informe de McKinsey del 2023, se estima que la GenAI podría aportar entre US$2,6 billones y US$4,4 billones anualmente a la economía global, una cifra comparable al PIB total del Reino Unido en 2021, aumentando la influencia global de la inteligencia artificial en un 15 % a 40 %.

El estudio de SAS y Coleman Parkes encuestó a 1,600 tomadores de decisiones en industrias clave como banca, seguros, sector público, salud, telecomunicaciones, manufactura, retail, energía y servicios profesionales. Reveló que el 75 % de las organizaciones ya han asignado presupuestos para invertir en GenAI en el próximo año fiscal.
Sin embargo, el informe también subraya un desafío crucial: la falta de una estrategia clara de GenAI. Solo el 9 % de los encuestados indicaron estar muy familiarizados con la adopción de GenAI en sus organizaciones, y solo el 25 % de aquellos cuyas organizaciones la han implementado completamente conocen bien la estrategia detrás de esta adopción.
A pesar de esta brecha en el entendimiento estratégico, la GenAI continúa avanzando como una herramienta transformadora en diversas industrias, prometiendo cambiar radicalmente la forma en que las organizaciones operan y crean valor en el mercado global.