El precio del café estableció un nuevo récord este martes al rebasar los $356 por quintal, marcando el nivel más alto desde la década de 1970. El aromático, que inició el año 2025 en $326, experimentó un aumento sostenido que culminó con esta cifra histórica alcanzada el 27 de enero.
El café, como otras materias primas, se cotiza en los mercados de futuros. En el caso de El Salvador, los productores operan bajo el Contrato C, que agrupa al café arábica suave de 19 países productores. Este contrato sirve de referencia para la venta, aunque los caficultores salvadoreños también tienen la posibilidad de negociar directamente con compradores y obtener mejores precios.
Según el Instituto Salvadoreño del Café (ISC), el alza está respaldada por factores climáticos adversos en Brasil, el principal productor mundial de café. La agencia meteorológica Somar Meteorologia informó que la región de Minas Gerais, productora clave de café arábica, registró la semana pasada solo un 53 % de las precipitaciones habituales, situación que ha generado estrés hídrico en las plantaciones y pone en riesgo la producción.

Por su parte, la Organización Internacional del Café (OIC) señaló que el fortalecimiento del dólar tras el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos también ha influido en el aumento de precios, encareciendo los costos para compradores internacionales, especialmente en Europa y Asia.
A estos factores se suman problemas logísticos que afectan el despacho de mercancías. La Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal) reportó retrasos significativos en el Puerto de Acajutla, donde productores han enfrentado demoras de hasta un mes para el envío de quintales de café debido a la saturación en los puntos de exportación.
El ISC destacó que este contexto global representa tanto un desafío como una oportunidad para los caficultores salvadoreños, quienes podrían beneficiarse de los altos precios si logran superar los obstáculos logísticos y climáticos.