El Salvador ha logrado vender su café a un precio un 29.4 % más alto que el promedio cotizado en la bolsa, en medio de una constante caída en el mercado especulativo que ha preocupado a los productores. A pesar de las caídas en el precio del café en los últimos ocho meses, el país ha logrado mantener un precio por encima de la media gracias a la venta de variedades especializadas.
El café es uno de los principales productos agrícolas exportados por El Salvador, solo superado por la caña de azúcar. Su precio se negocia en la Bolsa de Valores en Nueva York a través del Contrato C, que reúne a 19 países productores de café arábica suaves. Sin embargo, algunos productores no tienen la capacidad de evitar la especulación del mercado y dependen de las compras directas de variedades especializadas.
A pesar de las constantes caídas en el precio del café, el Consejo Salvadoreño del Café (CSC) reporta que en la cosecha 2022-2023 se ha logrado vender a un promedio de $230.40 por quintal, lo cual representa un incremento del 29.4 % en comparación con el promedio cotizado en la bolsa.
A pesar de estos resultados positivos, el precio promedio del quintal de café todavía está por debajo de los precios alcanzados en el ciclo 2021-2022. Aun así, El Salvador ha logrado mantener su posición en el mercado gracias a la popularidad de su café en los mercados especializados, donde los compradores están dispuestos a pagar un mejor precio por su calidad.
El país ha logrado vender el 69 % de su café como café diferenciado, con etiquetas como orgánico, sostenible y fair trade. Además, se ha reportado que países como Japón han pagado un promedio de $247 por quintal de café salvadoreño, mientras que Arabia Saudita ha pagado un promedio de $320.
A pesar de estos resultados positivos en la venta de café, las exportaciones han experimentado una caída del 4.7 % en mayo, en comparación con el mismo período del ciclo anterior. Además, el precio del café sigue en caída, debido a factores como la buena cosecha en Brasil, el principal productor mundial, y la reducción en la demanda en el hemisferio norte, que se encuentra en la temporada de verano.
El sector caficultor de El Salvador ha atravesado una crisis de bajos precios en los últimos años, lo que ha llevado a algunos productores a quemar sus fincas y cambiar a cultivos más rentables. A pesar de esto, el país ha logrado mantener su posición en el mercado y obtener un precio por encima de la media gracias a la calidad de su café especializado.