RBC Capital Markets ha publicado su informe “2025 Global Consumer Outlook”, en el que analiza los principales desafíos y oportunidades que enfrentarán los mercados globales de consumo durante el próximo año. Con un enfoque basado en perspectivas regionales y sectoriales, el documento identifica tendencias clave que influirán en el comportamiento de los consumidores y el desempeño del comercio minorista.
Presiones financieras para los consumidores
El informe destaca que los consumidores de todo el mundo seguirán enfrentando presiones financieras debido a la elevada inflación, los altos tipos de interés y el desempleo. Estos factores continuarán afectando la capacidad de consumo al menos durante el primer semestre de 2025, lo que se traduce en cambios en los hábitos de compra, como la preferencia por marcas blancas, la reducción del tamaño de las cestas de compras y una inclinación hacia los minoristas de descuento.
Tendencias globales del consumidor
- Transición hacia el crecimiento de volumen: Con la disminución de las presiones inflacionarias, se espera que el crecimiento del volumen impulse el rendimiento superior de las existencias. Los analistas señalan que el crecimiento orgánico dependerá más del volumen a medida que la capacidad de fijar precios disminuya y el gasto promocional aumente.
- Impacto de la política en EE. UU.: La posibilidad de una segunda administración de Donald Trump en la Casa Blanca genera preocupación por la posible introducción de nuevos aranceles. Estos podrían crear desafíos regulatorios y presiones de costos para las empresas, quienes probablemente trasladarán estos costos a los consumidores.
- Desafíos geopolíticos: Las políticas comerciales y los riesgos geopolíticos en regiones como China y Europa presentan riesgos para el crecimiento global. El informe también menciona la desaceleración en América Latina y las fluctuaciones monetarias como factores de riesgo adicionales.
- Desafíos de rentabilidad: Los costos crecientes, la moderación de la demanda y la volatilidad del tipo de cambio podrían afectar la rentabilidad de las empresas. Los analistas de RBC señalan que 2025 será un año de equilibrio de la dinámica de los márgenes, con una mayor necesidad de estrategias promocionales y ajustes en los gastos de marketing.
- Moderación del consumo en China: A pesar de la expectativa de una mejora gradual, la confianza del consumidor y el gasto en China continúan siendo moderados. Los cambios estructurales, como la preferencia por productos de segunda mano y plataformas de venta alternativas, reflejan un cambio en las preferencias de los consumidores.
- Aumento de la actividad de fusiones y adquisiciones: Ante la dificultad de lograr un crecimiento orgánico, RBC prevé un aumento en la actividad de fusiones y adquisiciones en la segunda mitad de 2025. La estabilización de las tasas de interés y las valoraciones razonables podrían crear un entorno propicio para la consolidación.
Perspectivas sectoriales
- Productos básicos de consumo: El sector enfrenta una presión continua debido al crecimiento mediocre del volumen y la incertidumbre macroeconómica. Los analistas de RBC señalan que persisten los riesgos de inflación y la evolución de la normativa.
- Marcas de lujo y premium: El informe destaca una moderación en el gasto de lujo, con los consumidores mostrando una mayor preferencia por alternativas de mayor valor. Este comportamiento se refleja en la reducción de la demanda de bienes de lujo y un enfoque en el ahorro.
- Restaurantes y ocio: Los analistas son “moderadamente optimistas” respecto a este sector. Se prevé una mejora gradual en la confianza del consumidor, lo que podría traducirse en un aumento en el tráfico de clientes después de un desafiante 2024. Sin embargo, la mejora será gradual debido a los precios elevados que aún afectan a los consumidores.
El informe de RBC Capital Markets presenta un panorama mixto para 2025. Si bien algunos sectores podrían beneficiarse de la estabilización económica, otros seguirán enfrentando desafíos relacionados con los costos, las políticas comerciales y los riesgos geopolíticos. Las empresas tendrán que ajustar sus estrategias para mantener la rentabilidad, mientras que los consumidores podrían continuar priorizando las opciones de mayor valor.