El Salvador evidenció un crecimiento sólido en sus finanzas públicas al registrar $3,853.3 millones en ingresos tributarios y contribuciones hasta mayo de 2025, según datos oficiales del Ministerio de Hacienda. Este resultado representa un aumento del 7.3 % en comparación con el mismo periodo del año anterior, lo que refleja tanto la fortaleza de la economía nacional como la eficiencia en la administración tributaria.
El impulso principal provino del Impuesto sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que en conjunto sumaron $3,717.4 millones. La recaudación del ISR alcanzó $1,802.3 millones, con un crecimiento interanual de $119.8 millones, destacándose la participación activa de los contribuyentes en declaraciones, retenciones y pagos a cuenta. Por su parte, el IVA mostró un comportamiento dinámico, con ingresos por $1,581 millones, impulsado principalmente por el consumo interno y las importaciones, que aportaron $724.9 millones y $856.1 millones, respectivamente.

Además, el fisco captó $148.8 millones en derechos arancelarios, mientras que los impuestos selectivos al consumo, gravando productos como bebidas alcohólicas y cigarrillos, contribuyeron con $99.2 millones. Las contribuciones especiales ligadas al sector turismo sumaron $34.7 millones y los ingresos no tributarios aportaron $135.9 millones, diversificando las fuentes de financiamiento público.
El desempeño fiscal positivo no solo confirma la solidez económica del país, sino que también subraya la eficacia en la gestión tributaria, fortaleciendo la base financiera para el desarrollo de políticas públicas y proyectos de inversión.