El saldo de la deuda de corto plazo de El Salvador cerró en $1,347.6 millones al finalizar septiembre de 2024, lo que representa una disminución del 50.2 % en comparación con el mismo período del año anterior. Este monto es $1,363.1 millones inferior a los $2,710.7 millones reportados en septiembre de 2023, según datos del perfil de endeudamiento público publicado por el Ministerio de Hacienda.
Este ajuste significativo ha reducido el peso de las obligaciones de corto plazo en relación con el producto interno bruto (PIB), pasando de un 7.7 % en 2023 a un 3.7 % en 2024.

Reducción en Letes y Cetes
La mayor contracción se dio en los Certificados del Tesoro (Cetes), cuyo saldo pasó de $1,254.6 millones en septiembre de 2023 a $252.2 millones en el mismo mes de 2024, con una disminución de $1,002.4 millones.
Por su parte, las Letras del Tesoro (Letes), que funcionan como un mecanismo de financiamiento a corto plazo, también reportaron una reducción de $360.7 millones, al pasar de $1,456.1 millones en 2023 a $1,300.4 millones en 2024.
Los Letes son utilizados para cubrir deficiencias temporales de caja y su emisión está limitada al 20 % de los ingresos corrientes, según lo establece el presupuesto. Mientras tanto, los Cetes operan como créditos puente.
Reperfilamiento de deuda
Desde octubre de 2023, el Gobierno implementó un programa de reperfilamiento de deuda para extender los plazos de los vencimientos de Letes, tradicionalmente establecidos a un año, hacia periodos de uno a siete años. Este programa incluyó la emisión de $1,500 millones en títulos con la banca privada y estaba previsto para concluir entre septiembre y octubre de 2024.
Deuda total y proyecciones
A septiembre de 2024, las Letes y Cetes representan el 6.8 % de la deuda del sector público no financiero (SPNF), cuyo saldo asciende a $19,752.6 millones. Sin embargo, esta cifra no incluye desde abril de 2023 las obligaciones relacionadas con el sistema de pensiones, las cuales superaron los $10,318.81 millones hasta septiembre de este año.
El Ministerio de Hacienda ha destacado que estas medidas buscan aliviar las presiones fiscales y optimizar el manejo de las finanzas públicas, posicionando al país en un escenario de mayor estabilidad económica a mediano y largo plazo.