Un grupo de trabajadores de Google, miembros del sindicato Alphabet Workers Union (AWU), ha solicitado protección para expresar sus inquietudes sobre la posible venta del navegador Chrome sin temor a represalias. Este pedido se produce en medio de uno de los casos antimonopolio más importantes en la historia de la empresa, liderado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DoJ).
Reunión con el Departamento de Justicia
El mes pasado, representantes del AWU se reunieron con la división antimonopolio del DoJ para discutir el impacto potencial de la orden judicial que podría forzar la venta de Chrome. Según el medio especializado The Verge, los trabajadores pidieron al gobierno considerar cómo las medidas impuestas podrían afectar a los empleados y garantizar que puedan participar en el debate sin represalias.
El caso antimonopolio contra Google
Chrome, que domina el 61% del mercado de navegadores en Estados Unidos según StatCounter, es una herramienta clave para el modelo publicitario de Google. A través del navegador, la empresa recopila datos de usuarios para optimizar anuncios, su principal fuente de ingresos.
El DoJ no solo busca la venta de Chrome, sino también el desacoplamiento de otros productos de Google, como el sistema operativo Android, su buscador y la tienda Google Play, para fomentar un mercado más competitivo. Según el juez Amit Mehta, estas medidas buscan beneficiar tanto a los anunciantes como a los consumidores.

Impacto en los trabajadores
De concretarse la separación de divisiones, algunos empleados de Google podrían enfrentarse a cambios drásticos en sus funciones o incluso perder sus puestos de trabajo. Los miembros del AWU denunciaron que la empresa los ha desalentado de expresar sus preocupaciones sobre el caso, citando antecedentes donde Google limitó a los empleados de hablar sobre litigios en curso.
Peter Schottenfeles, vocero de Google, aclaró que la empresa solo pidió a los empleados no hacer declaraciones en nombre de la compañía sin aprobación previa. Sin embargo, los trabajadores consideran insuficiente esta respuesta.
Declaraciones del AWU
Parul Koul, presidente del AWU e ingeniero de software, señaló que cualquier solución al caso será ineficaz si los empleados temen represalias. “En lugar de que Google nos involucrara en esta conversación, nos dijeron: ‘Ni siquiera hablemos de eso’. Nuestro enfoque surge de la sensación de que no se deben tomar decisiones sobre nosotros, sin nosotros”, afirmó Koul.
El sindicato no se ha posicionado a favor o en contra de las medidas propuestas, pero insiste en que los trabajadores deben ser incluidos en los debates sobre el futuro de la empresa.
El caso antimonopolio contra Google no solo tiene implicaciones significativas para el mercado tecnológico, sino también para los derechos laborales y la cultura corporativa dentro de la compañía. Mientras las autoridades y la empresa buscan resolver el caso, los empleados exigen ser parte activa de las decisiones que podrían transformar radicalmente su entorno laboral.