La bolsa de Nueva York volvió a caer este martes, tras el desplome sufrido el lunes, considerado uno de los peores días en meses o incluso años, según el índice. El mercado reaccionó ante los recientes anuncios y contraanuncios relacionados con nuevos aranceles a Canadá, lo que generó una gran incertidumbre entre los inversores.
Al cierre de la jornada en Wall Street, el Dow Jones, principal indicador de la bolsa, perdió un 1,14%, situándose en los 41.433 puntos. Por su parte, el S&P 500 cerró con una caída del 0,75%, alcanzando los 5.572 puntos, y el Nasdaq, de carácter tecnológico, descendió un 0,18%, finalizando en los 17.436 puntos.
El nerviosismo en el parqué neoyorquino quedó patente al observar que tanto el S&P 500 como el Nasdaq llegaron a registrar ganancias durante la jornada, para luego girar a pérdidas en el transcurso del día.
El comienzo de la jornada fue algo tranquilo, hasta que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un arancel del 50% sobre el aluminio y el acero canadiense, como respuesta a una decisión del gobernador de Ontario, Doug Ford, quien había decidido aumentar en un 25% la tarifa de electricidad exportada a varios estados fronterizos del norte de Estados Unidos. No obstante, tras una conversación telefónica entre Ford y el secretario de Comercio, Howard Lutnick, el gobernador canadiense suspendió su decisión, lo que llevó a Trump a insinuar que probablemente cancelaría el arancel impuesto, justo al filo del cierre de la jornada en Wall Street.
A pesar de la suspensión de la medida, los temores a una posible recesión, que se han incrementado en los últimos días, se sumaron a la incertidumbre causada por los sobresaltos arancelarios, dejando la bolsa de Nueva York bajo presión. La volatilidad en los mercados refleja la creciente preocupación entre los inversores sobre las políticas comerciales de la administración Trump y su impacto económico.
“Claramente hay una tolerancia al dolor por parte de la Administración cuando persigue sus objetivos comerciales, que no son obligatoriamente de naturaleza económica”, comentó Ross Mayfield, analista de Baird Investment, en una entrevista con el canal CNBC.
La jornada en Wall Street reafirma que, a pesar de los intentos de estabilizar los mercados, la incertidumbre política y económica sigue pesando sobre la confianza de los inversores.