Aunque la canasta exportadora de El Salvador se concentra principalmente en textiles y confección, existen excepciones de productos que destacan a nivel internacional. La empresa Kyocera AVX, ubicada en la zona franca de San Bartolo, ha sido un pilar en la industria salvadoreña desde hace 47 años con su producción de capacitores electrónicos.
AVX, subsidiaria de la japonesa Kyocera, inició sus operaciones en El Salvador en 1977 y es responsable de más de $193.1 millones en exportaciones de condensadores eléctricos al cierre de 2023, posicionándolos como el cuarto producto de mayor venta al mercado exterior.
Desde su planta, los empleados salvadoreños de Kyocera AVX fabrican más de 200 millones de unidades por semana. Estos condensadores eléctricos, también conocidos como chips, son componentes esenciales en las industrias de aviación, automotriz, médica y aeroespacial. Según la firma, un teléfono inteligente contiene aproximadamente 2,000 capacitores, mientras que un vehículo requiere más de 15,000 para sistemas como el ABS, las bolsas de aire y los tableros de control.
El liderazgo de Kyocera AVX quedó reflejado en un ranking elaborado por la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), que reconoció a la empresa como el mayor exportador del sector electrónico y destacó sus ventas a «países singulares».

Kyocera AVX ha superado múltiples desafíos en El Salvador, incluyendo la guerra civil de la década de 1980, el terremoto de 2001, la crisis financiera internacional de 2009 y la recesión económica de 2020 provocada por la pandemia de COVID-19. Durante el confinamiento de 2020, la empresa obtuvo una autorización especial para operar con un personal reducido y entregar capacitores electrónicos destinados a respiradores autónomos, esenciales para salvar vidas.
En 2022, la invasión rusa en Ucrania afectó el suministro mundial de capacitores electrónicos, beneficiando a Kyocera AVX, que alcanzó un récord de exportaciones de $259.9 millones. Sin embargo, en 2023, las exportaciones se redujeron a $193.1 millones debido a un «efecto rebote» por la saturación de inventarios, según Alfredo Tovar, gerente general de Kyocera AVX.
Motivada por el aumento de la demanda, la empresa anunció en 2022 una inversión de $20 millones, de los cuales ejecutó $10 millones. A pesar de una caída del 18.4% en las exportaciones de condensadores eléctricos entre enero y mayo de 2024, Tovar confía en una recuperación para finales de 2024.
Kyocera AVX opera la planta más grande de tantalio a nivel mundial en El Salvador, con líneas de producción de capacitores cerámicos y de niobio. La mayor parte de su producción se destina a mercados asiáticos, los gigantes de la industria automotriz.
A pesar de los desafíos, Kyocera AVX sigue siendo un referente en la industria electrónica, demostrando su capacidad de adaptación y liderazgo en el mercado global.