Ahora que el presidente Donald Trump, avanza en su estrategia de imponer aranceles a todo el mundo, México puede al menos asegurar que sus exportaciones hacia Estados Unidos obtengan un gravamen menor a los otros, dijo el secretario de Economía, Marcelo Ebrard.
“Si vamos a ir a un sistema arancelario tan alto, lo que tenemos que hacer es buscar un trato preferencial para México”, dijo el jueves Ebrard hablando vía videollamada desde Washington durante la conferencia de prensa diaria de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La presión sobre Sheinbaum para que demuestre que puede proteger la economía y los empleos de México va en aumento a medida que Trump intensifica sus planes arancelarios. El presidente estadounidense anunció un impuesto del 25% a las importaciones automotrices a partir del 3 de abril, aunque las exportaciones mexicanas que contienen piezas estadounidenses podrían calificar para una tasa menor.
Ebrard afirmó haber recibido “buen trato” por parte del secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick. durante las conversaciones comerciales que mantienen casi semanalmente. El funcionario mexicano dijo haber explicado a los funcionarios estadounidenses la importancia de la industria automotriz y de autopartes de México para EE.UU., ya que exporta casi 3 millones de vehículos y el 40% de las autopartes que compra EE.UU.
El secretario añadió que la mayoría de los vehículos exportados a EE.UU. desde México tienen un alto porcentaje de piezas fabricadas en territorio estadounidense, como resultado de la fuerte integración de la industria automotriz de América del Norte. La proclamación de Trump del miércoles indicó que los gravámenes sobre los automóviles solo se aplicarán a la parte no estadounidense de los vehículos y piezas importadas bajo el tratado de libre comercio con Canadá y México.
“En otras palabras, los vehículos que exportamos no tendrán el arancel del 25%”, dijo. “Lo que buscamos es que los productos hechos en México tengan mejor precio que cualquier otro país que exporte a EE.UU.”.
Durante la conferencia de prensa, Sheinbaum afirmó que su gobierno no se apresurará a anunciar una respuesta a los aranceles automotrices de Trump y que esperará su decisión sobre aranceles de represalia el 2 de abril para dar una respuesta al día siguiente. Aseguró que su prioridad es proteger el empleo mexicano.
“El 3 de abril daremos una respuesta integral de lo que va a hacer México ante esta situación. Esto no quiere decir que el 3 de abril se cierren las puertas de trabajo con EE.UU.”, dijo Sheinbaum. “Las puertas están abiertas para dialogar con EE.UU.”.
Sheinbaum agregó que solicitó una reunión con ejecutivos de la industria automotriz mundial para comprender mejor el alcance de los aranceles.
Trump firmó una proclamación para implementar un arancel del 25% sobre las importaciones de automóviles y prometió un castigo más severo a la UE y Canadá si unen fuerzas contra EE.UU. La decisión se suma a los aranceles ya aplicados a México y Canadá que no incluyen productos cubiertos por el acuerdo comercial entre EE.UU., México y Canadá.
En medio de las anteriores amenazas arancelarias, la administración de Sheinbaum se ha mantenido alejada de apresurarse a anunciar medidas de represalia y ha mantenido un diálogo constante con el equipo del presidente estadounidense.