Las remesas familiares volverán a romper récord este año con el ingreso de más de $8,187 millones, según proyecciones del Diálogo Interamericano.
El centro de pensamiento, con sede en Washington, estima que las remesas crecerán un 4 % respecto a los $7,855.4 millones recibidos al término de 2022. Es decir, que los hogares salvadoreños recibirán $331 millones adicionales.
En una economía dolarizada como El Salvador, las remesas son uno de los principales generadores de divisas. Estos ingresos son el principal sostén para un 25 % de los hogares y llegan a superar incluso a las exportaciones.
El informe publicado por el Diálogo Interamericano, el pasado 9 de septiembre, señala que El Salvador es uno de los países en América Latina y el Caribe más dependiente de las remesas. Una categoría que ostenta junto a Guatemala, Honduras y Nicaragua.
Las remesas que llegan a los hogares salvadoreños representarán un 24.5 % del Producto Interno Bruto (PIB, producción de bienes y servicios) de 2023, una cuota inferior al 26.7 % registrado el año pasado. Esto se explica porque el tamaño de la economía será mayor y, aunque los envíos crecen, su participación en el PIB se ajusta.
Uno de los más dependientes de L.A.
El Salvador es el tercer país de la región con la cuota más alta de las remesas con relación al PIB, solo superado por Nicaragua, con un 29.1 %, y Honduras, con un 28 %.
El Banco Central de Reserva (BCR) reporta que los envíos de las ayudas de los salvadoreños residentes en el exterior superan los $4,711 millones entre enero y julio pasado, con un crecimiento de un 5.6 %.
El 93.1 % de estos recursos procede de Estados Unidos, donde residen más de 2.5 millones de salvadoreños.
La Patrulla Fronteriza (CBP) registra que entre octubre de 2022 y julio de 2023 (lo que va del año fiscal en EE. UU.) se han detenido a 48,868 salvadoreños sin documentos en la frontera sur, de los cuales 32,135 fueron registrados en los primeros siete meses de 2023.
Casi un salario mínimo.
Un hogar salvadoreño recibe en promedio $316.1 mensuales, una cifra que representa un 86 % de un salario mínimo de la industria, fijado en $365.
Sin embargo, ese promedio llega a $405.8 en Chalatenango, el departamento con la cifra más alta. También es superior en Cabañas, al llegar a $388.1, y en Morazán, con $368.3.
Un estudio elaborado por el BCR junto con la Organización Internacional para los Migrantes (OIM) reveló que el 94.7 % de las remesas se destina para el consumo y manutención de las familias, seguido de pagos de servicios básicos, gastos médicos y mantenimiento de una vivienda.
Otro 9.9 % se destina para un ahorro, un 3.3 % para insumos de un negocio propio, un 1.9 % para compra de vivienda y un 0.9 % se utiliza en el pago de la deuda del viaje para migrar.
De acuerdo con el estudio, un 40.6 % de los salvadoreños en Estados Unidos considera que las remesas son la única fuente de ingresos para su familia en el país.