Las remesas familiares en El Salvador han experimentado una recuperación significativa en abril, revirtiendo la caída sufrida en el primer trimestre de 2024, según informó el Banco Central de Reserva (BCR).
Tras una disminución del 1% en el primer trimestre, las remesas acumularon un crecimiento interanual del 2.2%. Este aumento se reflejó en el ingreso registrado en abril, que alcanzó los $741.8 millones, marcando el punto más alto del año y representando un crecimiento del 11.3% en comparación con el mismo mes del año anterior.
Durante el periodo de enero a abril, los hogares salvadoreños recibieron un total de $2,637.4 millones en remesas, lo que supone un aumento de $57.1 millones en comparación con el mismo periodo del año anterior.
A pesar de esta recuperación, el crecimiento en los primeros cuatro meses de 2024 es el más bajo desde 2015, exceptuando el año 2020, cuando se registró una caída del 10.1% debido al impacto económico de la pandemia de COVID-19.
Las remesas desempeñan un papel crucial en la economía salvadoreña al proporcionar un importante sustento para un 24% de los hogares del país, de los cuales el 19% se encuentra en situación de pobreza. Además de ayudar a estas familias, los ingresos por remesas representan un estímulo clave para la economía local, ya que la mayor parte se destina al consumo, impulsando así la producción de las empresas locales.
Casi el 93% de las remesas recibidas proviene de Estados Unidos, con un total de más de $2,637.4 millones acumulados de enero a abril. El resto proviene principalmente de Canadá, España, Italia y el Reino Unido.
Aunque se observaron reducciones en el ingreso de remesas en algunos distritos, el Banco Central destaca la importancia de este flujo de ingresos para el bienestar de las familias salvadoreñas y para la economía del país en general.