El café salvadoreño es reconocido y apreciado a nivel mundial por su dulzura, variedad de sabores, cuerpo y acidez. Este café ha construido una reputación sólida a lo largo de los siglos, convirtiéndose en un elemento esencial de la cultura y economía de El Salvador. Syngenta, empresa líder en el campo, trabaja arduamente para garantizar el bienestar de los cultivos cafetaleros.
En los últimos años, El Salvador y otros países centroamericanos se han enfrentado a desafíos en la producción de café debido a la propagación de la roya, un hongo que afecta las hojas de los cafetales. En el último ciclo productivo, se obtuvieron 600,000 quintales menos de café, lo que resultó en la pérdida de alrededor de 40,000 empleos temporales en la recolección de café y un déficit de $30 millones en salarios. Esta crisis ha subrayado la importancia de la sostenibilidad y la diversificación en la industria cafetalera, así como la cooperación internacional para superar los desafíos globales.

Andrés Duarte de Syngenta enfatiza la necesidad de renovar el parque cafetero y la importancia de concienciar a los cultivadores sobre los recursos necesarios para lograrlo. También destaca la relevancia de tener una caficultura relativamente joven que garantice la estabilidad de la producción y las inversiones del cultivo.
Syngenta colabora activamente con centros de investigación y gremios cafetaleros en el desarrollo de tecnologías para controlar enfermedades como la roya y la broca. La empresa reafirma su compromiso de fortalecer la investigación y la transferencia de tecnología en este sector.
«Como parte de su compromiso, Syngenta trabaja en el desarrollo de un nuevo fungicida, «ELATUS® 45 WG», diseñado específicamente para el control preventivo de la roya en los cultivos de café en El Salvador. Este fungicida ofrece una protección integral de las hojas, con una duración de al menos 45 días. Además, utiliza una formulación de alta calidad y un nuevo ingrediente seguro para el cultivo. Este producto está destinado a brindar una sólida protección a los productores en la lucha contra las plagas en los cultivos de café», Destacó Andrés Duarte de Syngenta.

El café de El Salvador no solo es un deleite para los amantes de esta bebida en todo el mundo, sino también un impulso económico esencial y un tesoro nacional. Su historia es un testimonio del trabajo arduo y la pasión de quienes lo cultivan, y su futuro continúa siendo brillante en la industria cafetalera global.
Syngenta, seguiremos invirtiendo en recursos adicionales para contribuir al cultivo del café, impulsando la innovación y la sostenibilidad que respaldan a los caficultores salvadoreños en la preservación de este valioso recurso.