La Fundación Salvadoreña para la Salud y el Desarrollo Humano (FUSAL) y Grupo Roble han unido fuerzas en una alianza estratégica para apoyar a las familias salvadoreñas que enfrentan inseguridad alimentaria tras desastres naturales. En el marco del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, ambas organizaciones han reafirmado su compromiso con las poblaciones más vulnerables de El Salvador, destacando la importancia de la seguridad alimentaria en la recuperación post-emergencia.
FUSAL, con más de 38 años de experiencia en la respuesta a emergencias y crisis humanitarias, ha distribuido más de $874 millones en donaciones a lo largo de su trayectoria, beneficiando a una vasta red de instituciones y comunidades. Este compromiso se refleja en su reciente intervención tras las fuertes lluvias provocadas por una depresión tropical en junio de 2024, que llevaron a la declaratoria de estado de emergencia en todo el país.
Durante este evento climático, se activaron 120 albergues para proteger a 4,100 personas afectadas. Sin embargo, incluso después de que las lluvias cesaron, muchas familias en municipios como Usulután, Ahuachapán y Sonsonate continúan luchando para restaurar sus medios de vida, recuperar pérdidas personales y reparar viviendas dañadas.




En respuesta a esta situación, Grupo Roble, un aliado clave de FUSAL, realizó una donación de $5,000, lo que permitió llevar asistencia alimentaria a 100 familias de Puerto El Triunfo, Usulután, con niños en riesgo nutricional. Esta contribución ha sido crucial para garantizar un mes de seguridad alimentaria para estas familias, proporcionando kits que incluyen alimentos básicos como aceite, azúcar, harina de maíz, sal, pasta, frijoles, leche en polvo, Incaparina, agua potable y arroz fortificado.
Karla Segovia, directora ejecutiva de FUSAL, señaló que este esfuerzo va más allá de la entrega de alimentos. “El objetivo es proporcionar un mes de seguridad alimentaria mientras estas familias se recuperan y restauran sus medios de vida. Este esfuerzo integral, gracias a Grupo Roble, estará respaldado por el seguimiento del equipo técnico del Programa de Primera Infancia de FUSAL, garantizando que la emergencia no afecte negativamente el desarrollo infantil”, destacó Segovia.
La alianza entre Grupo Roble y FUSAL demuestra el impacto significativo que la asistencia humanitaria y el apoyo en seguridad alimentaria pueden tener en la vida de las familias afectadas. Grupo Roble, como aliado institucional, continúa activando donaciones extraordinarias para responder a emergencias y participar en campañas especiales, subrayando su compromiso con el bienestar de las comunidades salvadoreñas.