La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, declaró este martes que la principal prioridad para la economía mundial es resolver las crecientes tensiones comerciales entre países, ya que estas representan un freno significativo para el crecimiento global.
Durante su intervención, Georgieva enfatizó que, además de instar a los gobiernos a poner en orden sus economías internas, el FMI también está realizando una autoevaluación profunda sobre la forma en que diseña sus programas de préstamo, especialmente en cuanto a su duración, condiciones y eficacia.

“Estamos revisando cómo diseñamos nuestros programas, con especial atención en los países que han recurrido repetidamente al FMI, como Argentina, Pakistán y Egipto”, señaló Georgieva. El objetivo, añadió, es garantizar que los planes financieros realmente contribuyan a una recuperación sostenible y no se conviertan en ciclos de endeudamiento constante.
Asimismo, la funcionaria afirmó que el FMI está orientando su enfoque hacia reformas estructurales que promuevan un crecimiento económico más robusto, dando mayor protagonismo al desarrollo del sector privado como motor clave del progreso.
Este nuevo enfoque busca reforzar la confianza internacional en la labor del Fondo y responder de manera más eficaz a los desafíos económicos actuales, marcados por la incertidumbre geopolítica, la inflación persistente y las vulnerabilidades financieras.