Más de 500 empresarios de 20 países dieron inicio este lunes en Sevilla, España, al VIII Congreso Iberoamericano del Consejo Empresarial Alianza por Iberoamérica (CEAPI), bajo el inspirador lema «Conectamos continentes, construimos oportunidades». Este encuentro, que se celebra del 3 al 4 de junio, marca una década de CEAPI y busca profundizar los vínculos entre Europa y América Latina en áreas estratégicas como inteligencia artificial, energía y sostenibilidad.
Núria Vilanova, presidenta de CEAPI, abrió el evento destacando el compromiso del sector empresarial con una transformación que impulse empresas multiiberoamericanas y fomente un capitalismo consciente, con énfasis en el liderazgo femenino, el talento joven y la responsabilidad social.
Durante la jornada inaugural se realizaron encuentros sectoriales privados en la Fundación Cajasol, donde se discutieron oportunidades en sectores clave como tecnología, IA y fintech, salud, bienes raíces, infraestructuras, consumo, turismo, sostenibilidad y energía.

Un manifiesto por una Iberoamérica protagonista en el mundo multipolar
En el marco del congreso, CEAPI presentó el manifiesto «Más Iberoamérica, una estrategia global en un mundo multipolar», un llamado a la acción con 10 propuestas clave para consolidar a la región como un actor estratégico a nivel global.
«De ser prácticamente irrelevante para la UE, Iberoamérica ha pasado a ser estratégica para el mundo», afirmó Vilanova, subrayando que es hora de que los países iberoamericanos recorran juntos el camino del crecimiento compartido, bajo el lema “creer, crear y crecer”.
El manifiesto propone, entre otros puntos, avanzar hacia modelos empresariales regionales, impulsar una nueva política migratoria basada en afinidades culturales, y pasar de inversiones extractivas a proyectos colaborativos de desarrollo. Además, pone sobre la mesa la educación, el liderazgo femenino y el empoderamiento juvenil como herramientas para combatir la desigualdad en la región.
Con esta edición, CEAPI no solo celebra 10 años de historia, sino que reafirma su visión de una Iberoamérica conectada, fuerte y con voz propia en el escenario internacional.