El director ejecutivo de Meta Platforms, Mark Zuckerberg, compareció ante un tribunal en Washington en un juicio clave impulsado por la Comisión Federal de Comercio (FTC), que busca obligar a la compañía a desprenderse de Instagram y WhatsApp. El regulador acusa a Meta de adquirir estas plataformas para frenar a posibles competidores de Facebook, amenazando el modelo de negocio del gigante tecnológico.
Durante su declaración, Zuckerberg defendió que las adquisiciones, realizadas hace más de una década, respondieron a un intento de mejorar la experiencia del usuario y no a una estrategia para eliminar la competencia. Argumentó que las redes sociales han evolucionado, y que hoy en día gran parte del contenido que consumen los usuarios proviene de cuentas que siguen por intereses, y no necesariamente de sus amigos.
El caso de la FTC se basa en correos electrónicos internos donde Zuckerberg discutía la posibilidad de adquirir Instagram para “neutralizar” a un competidor emergente. El organismo también sostiene que WhatsApp representaba una amenaza como futura red social. En contraste, Meta argumenta que sus adquisiciones han beneficiado a los usuarios y que hoy enfrenta una fuerte competencia de plataformas como TikTok, YouTube y la aplicación de mensajería de Apple.

La disputa legal también pone en juego el concepto de competencia en el ámbito digital. Mientras la FTC considera que Meta tiene un monopolio en la categoría de plataformas sociales centradas en las relaciones personales, Meta insiste en que los usuarios pueden migrar fácilmente entre servicios como Snapchat, TikTok o Reddit, lo que evidencia un ecosistema altamente competitivo.
Una derrota legal tendría profundas implicaciones para Meta. Según estimaciones de Emarketer, Instagram generaría más de 37 mil millones de dólares en ingresos publicitarios en EE. UU. este año, más de la mitad del total de Meta en ese mercado. WhatsApp, aunque actualmente con menores ingresos, es la aplicación con más usuarios diarios y está en plena expansión de su modelo de negocio con servicios de mensajería empresarial.
El juicio, que podría extenderse hasta julio, representa un momento decisivo para Meta. En caso de que la FTC logre probar su caso, tendría que emprender un proceso adicional para demostrar que medidas como la separación de Instagram o WhatsApp restaurarían la competencia en el mercado.