El Salvador expuso este miércoles una visión renovada de desarrollo sostenible durante el Foro Ambiental Nacional 2025, un encuentro que reunió a especialistas, representantes institucionales y actores del sector productivo para analizar los principales desafíos climáticos y económicos del país. La participación del ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Fernando López, destacó por su enfoque en la relación entre innovación, productividad y resiliencia como ejes para fortalecer la economía salvadoreña en el contexto del cambio climático.
En su intervención, López subrayó que el país ha experimentado un viraje estratégico en materia ambiental durante los últimos años, pasando “de la degradación a la recuperación y de la amenaza a la resiliencia”. Según explicó, este giro ha sido posible gracias a programas de reforestación, restauración de ecosistemas, modernización del manejo del recurso hídrico y al fortalecimiento de los sistemas de alerta temprana, acciones que contribuyen a mitigar riesgos climáticos que históricamente han afectado la estabilidad económica del país.
Aunque El Salvador solo aporta el 0.04 % de las emisiones globales, el ministro enfatizó que la nación está elevando su ambición climática, no por obligación, sino por convicción. “No vamos a quedarnos quietos; se trata de dar el ejemplo”, afirmó, al destacar que las políticas ambientales tienen un impacto directo en la competitividad del país, reduciendo pérdidas por desastres naturales, abriendo nuevas inversiones verdes y generando empleos en sectores emergentes.

El funcionario también resaltó los avances en la transición hacia una matriz energética más limpia y moderna, una estrategia que, además de reducir emisiones, fortalece la seguridad energética y abre nuevas oportunidades en la industria, el comercio y los servicios. Este proceso, indicó, contribuye a dinamizar la economía mediante la atracción de proyectos de energía renovable y tecnologías de eficiencia energética.
Entre los logros señalados, López mencionó mejoras en infraestructura resiliente, gestión hídrica, vivienda segura y conservación de ecosistemas, pilares que permiten consolidar un entorno más estable para el desarrollo económico y social. Asimismo, reiteró que El Salvador mantiene abiertas las puertas a la cooperación internacional, alianzas público-privadas e intercambio técnico, elementos que considera fundamentales para sostener el ritmo de transformación ambiental y económica que el país impulsa.
El Foro Ambiental Nacional 2025 cerró con un llamado a fortalecer la colaboración entre Estado, empresas y ciudadanía para construir un modelo de crecimiento capaz de enfrentar los desafíos climáticos sin comprometer el desarrollo productivo, una apuesta que posiciona a El Salvador como referente regional en resiliencia y sostenibilidad.


