El Salvador sufrirá un déficit de 9.2 millones de quintales de granos básicos en 2025, una cifra preocupante tras las pérdidas ocasionadas por la tormenta tropical Sara, advirtió este martes la Asociación Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo).
La demanda anual de granos básicos, incluyendo maíz, frijoles, arroz y sorgo, asciende a 25 millones de quintales, pero la producción de este año se estima que alcanzará solo 15.73 millones de quintales, un 37 % menos de lo necesario para cubrir las necesidades del país. Este pronóstico representa una caída significativa respecto a las expectativas iniciales de producción, que en junio se estimaban en 17.6 millones de quintales para la cosecha 2024-2025.
Las fuertes lluvias registradas por tres días consecutivos debido a la tormenta tropical Sara afectaron gravemente los cultivos, provocando la pérdida de más de 1.88 millones de quintales, con un costo estimado de $65.2 millones en inversión perdida para los productores. De esta cantidad, 1.45 millones de quintales corresponden a maíz, mientras que 425,565 quintales fueron de frijoles.
Campo detalló que la producción de maíz se situará en 11.5 millones de quintales, un déficit de 7.27 millones respecto a la demanda nacional, que alcanza los 18.8 millones de quintales. Además, la cosecha de frijoles dejará solo 1.4 millones de quintales, un déficit de 950,565 quintales con respecto a los 2.4 millones requeridos.

Aunque los cultivos de arroz y sorgo no sufrieron pérdidas por las lluvias, la producción nacional sigue siendo insuficiente para cubrir la demanda interna. El país produce 665,000 quintales de arroz, mientras que se requieren cerca de 900,000 quintales, lo que deja un déficit de 235,000 quintales. En el caso del sorgo, la producción nacional de 2.1 millones de quintales está por debajo de la demanda de 2.9 millones, generando una brecha de 800,000 quintales que debe ser cubierta con importaciones.
Campo había advertido que la producción de cereales para 2024 sería afectada por las condiciones climáticas, especialmente por la transición entre los fenómenos de El Niño y La Niña, así como por los altos costos de los insumos agrícolas y la reducción en las áreas de cultivo.
Caen las importaciones
Según el Banco Central de Reserva (BCR), las importaciones de cereales como frijoles, maíz y arroz totalizaron $165.26 millones entre enero y septiembre de 2024, lo que representa una disminución del 21.2 % en comparación con los $209.8 millones del mismo período en 2023. Sin embargo, el volumen de cereales importados aumentó un 2.1 %, alcanzando los 596.88 millones de kilogramos, lo que equivale a 12.4 millones más que en 2023.
Estados Unidos sigue siendo el principal proveedor de cereales de El Salvador, con una participación del 67 %, con exportaciones por más de $111.9 millones. Brasil ocupa el segundo lugar con $30.5 millones, seguido de Tailandia con $9.3 millones hasta septiembre de este año.