La Asociación Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo) descartó este miércoles un incremento en el precio de los lácteos y las carnes rojas a pesar de las afectaciones causadas por las recientes lluvias.
Campo señaló que los ganaderos de la región oriental son los más afectados debido a las crecidas del río Grande de San Miguel, que arrastraron al ganado e inundaron parcelas. La Mesa Agropecuaria, Rural e Indígena informó anteriormente que al menos 50 reses han muerto debido a las correntadas e inundaciones. Sin embargo, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) confirmó solo tres muertes de animales hasta el lunes.
Luis Treminio, presidente de Campo, aseguró que no se espera un aumento en los precios de los lácteos y carnes ya que Nicaragua, proveedor principal de estos productos para El Salvador, no ha reportado problemas significativos en su sector ganadero. «Esperemos que no haya alzas, porque la mayor cantidad de lácteos que consumimos viene importada. Nicaragua no está reportando problemas en la ganadería, por lo tanto, consideramos que no hay motivo para un incremento en los precios», declaró Treminio.
A pesar de la estabilidad en los precios, Treminio mencionó que los costos de producción para los ganaderos salvadoreños están aumentando. Las inundaciones han afectado los pastizales, obligando a los productores a comprar alimento concentrado para el ganado, incrementando así los costos operativos.
Campo lamentó la falta de construcción de bordas en el río de San Miguel, a pesar de las promesas de varias administraciones gubernamentales. La gremial recordó que el sector agropecuario también ha experimentado el cierre de ganaderías en 2023 debido a la baja rentabilidad en la producción de lácteos y carnes.
Las lluvias han tenido un impacto significativo en el sector productivo de El Salvador, con pérdidas confirmadas en ganado y granos básicos.
Campo hizo un llamado al gobierno para crear un fondo especial de apoyo para la agricultura de subsistencia y presentará una propuesta de política agropecuaria a la nueva administración. Este documento, previamente presentado a gobiernos anteriores, no ha sido retomado. La gremial destaca la necesidad de una coordinación clara entre el MAG y el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) para determinar las fechas adecuadas para la siembra, y entre el MAG y el Ministerio de Economía (Minec) para regular las importaciones.
“Deberían de regularse las importaciones, permitiendo que ingresen al país solo para cubrir el déficit que tenemos y no más allá del mismo”, concluyó Treminio.